viernes, 22 de marzo de 2013

Pupilas de aceituna (que desde ya era su nuevo nombre) pidió 5 gramos de problemas.
El hombre -sin hacer mucho acto- le entregó una sonrisa, una sonrisa blanca contenida en una bolsita transparente que reflejaba la delicada expresión de felicidad de pupilas

--Pupilas de aceituna no volvió a ser vista en los suburbios anymore--